El obispo de Huelva, José Vilaplana, presentó la obra «Simpecados del Rocío, Speculum Reginae Roris», de Juan Miguel González y Jesús Rojas-Marcos
JAVIER AZCÁRATE / ALMONTE (HUELVA)
Almonte volvía a convertirse la noche del sábado en referente espiritual en estos inicios del Año de la Fe. La incesante llegada de peregrinos para ganar el Jubileo coincidía ayer con el turno de guardia abierto para todos los devotos de la Virgen del Rocío, con la presentación de la guía del peregrino y la puesta de largo de la que se considera la gran obra editorial del bicentenario del Rocío Chico, “Simpecados del Rocío, Speculum Reginae Roris”, escrita por el catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla, Juan Miguel González, y el profesor Jesús Rojas-Marcos. Como pastor de su Iglesia, el obispo de Huelva, José Vilaplana, presidió estos actos en el marco de la Parroquia de la Asunción y en la sede social de la Hermandad Matriz de Almonte.
La sabatina, que cada último sábado precede al turno de vela a la Señora y que ayer cantó el Coro de la Hermandad de Triana, dio paso a la presentación de la Guía del Peregrino del Año Jubilar. En el acto, el prelado onubense subrayó la importancia de las peregrinaciones como “modelo de entrega del cristiano y luz del mundo en el desierto espiritual de la contemporaneidad”.
La guía, editada por la Hermandad Matriz de Almonte, es un práctico manual, con eminente carácter pastoral, en el que no faltan referencias históricas de la universal devoción rociera y unas notas acerca delCamino Europeo del Rocío, como muestra del ininterrumpido peregrinar de romeros. También incluye los requisitos establecidos por la Iglesia para alcanzar el jubileo y una guía espiritual con el ritual completo para la peregrinación en este año santo. Además, contiene las oraciones habituales del cristiano y las letras de las Salves más populares dedicadas a la Santísima Virgen en su advocación del Rocío. Los ejemplares se pueden adquirir en los despachos oficiales de recuerdos de la Virgen, en Almonte y en El Rocío. Se han editado 2.000 números en las dos primeras ediciones que han salido a la venta.
Dos tomos
Tras el rezo del Santo Rosario, que como cada día daba comienzo a las nueve de a noche, el obispo de Huelva presentó el libro “Simpecados del Rocío, Speculum Reginae Roris”, una obra concebida como cumbre editorial del bicentenario del Voto de Acción de Gracias del pueblo de Almonte a su Patrona, por los acontecimientos sucedidos en la Guerra de la Independencia, cuando la Virgen del Rocío salvó a la población del asalto de las tropas napoleónicas. El libro, prologado por el propio prelado y por el presidente de la Hermandad Matriz, Juan Ignacio Reales, consta de dos tomos en los que, además de un estudio exhaustivo desde la perspectiva histórico artística del fenómeno mariano rociero, se analizan los simpecados de todas las hermandades filiales.
La obra ha sido editada por la Matriz de Almonte con Ediciones Tartessos, editorial especializada en libros de Historia del Arte de gran formato. Sus autores, el catedrático de la Universidad Hispalense, Juan Miguel González, y el profesor Jesús Rojas-Marcos ofrecen una perspectiva inédita sobre los estandartes de las corporaciones rocieras, símbolos de la piedad de los millones de fieles que cada año acompañan a las hermandades peregrinando desde todos los rincones de mundo. En definitiva, el libro constituye un paso más en el estudio y la difusión de una Fe que no entiende de fronteras.
La presentación de la obra dio paso a la noche en la que todos los rocieros pueden velar a la Patrona de Almonte. Los almonteños, con su infinita generosidad, comparten desde el anterior traslado en 2005 susnoches de guardia con todas las personas que, cada último sábado de mes, se quieran sumar a la ancestral tradición de hacer guardia junto a la Reina de las Marismas en la Parroquia de la Asunción. La madrugada junto a la Señora es especial. El rezo del Santo Rosario y la bendición y exposición del Santísimo Sacramento dan paso al recogimiento. El silencio de la noche sólo se interrumpe con plegarias y cantos a la Virgen, espontaneidad de un pueblo llamado a ser faro y guía de la espiritualidad en la Nueva Evangelización.
